Dejar en remojo las lentejas. Aunque la lenteja pardina se puede cocinar sin necesidad de remojo previo, a mi me gusta dejarla entre 3-4 horas sumergidas en agua para ahorrar algo de tiempo de cocción y limpiar e hidratarla un poco.
Este paso os parecerá diferente a la receta tradicional para preparar lentejas, pero queda da un resultado exquisito. Tritura con una batidora eléctrica la cebolla, tres de los dientes de ajo, el pimiento y dos tomates.
Ponlo en una olla a fuego medio con 4-5 cucharadas de aceite hasta que pierda casi toda la humedad y empiece a casi agarrarse a la olla.
Añade las lentejas, el chorizo, el tocino, el laurel, la zanahoria pelada y cortada en láminas, sal-pimenta y déjalo cocer unos 20-25 minutos.
En una sartén a parte, rehoga el diente de ajo que nos quedaba, pelado y cortado en trozos pequeños. Cuando dore añade el comino y el pimentón. 💡Truco: retira un poco del fuego antes de añadir el pimentón y el comino porque si el aceite está muy caliente se puede quemar y dar sabor amargo. Finalmente añade el tomate y fríe durante unos 5 min.
Añade esta última preparación a las lentejas a mitad de cocción y termina de cocerlas.
!Seguro que quedan riquísimas!